Así es como se denominan los seguros que nos protegen de diferentes tipos de siniestros. En el hogar se desempeñan múltiples funciones, por eso en el sector del Seguro, las coberturas para Vivienda son también variadas, como la vida misma.
Esto significa que la póliza se activa en caso de distintos incidentes, aunque no tengan ninguna relación entre sí. Por ejemplo, averías de tuberías, goteras, cristales, daños a vecinos, robos e incendios. Además, cuenta con la posibilidad de asegurar el continente (estructura de la vivienda) y el contenido (los bienes que se encuentran en el hogar). Esta segunda será la opción adecuada si somos inquilinos.
A la hora de contratar un Seguro de Hogar, se tomará en consideración para el cálculo de la prima, las características de la vivienda y el valor de su contenido declarado por el asegurado. De generarse algún siniestro, será el valor por el que se establecerá la indemnización. En caso de existir diferencia entre el capital asegurado y el valor real, se indemnizará teniendo en cuenta la proporción que exista al momento del siniestro. Por este motivo, es importante su correcta contratación y posteriores actualizaciones.
También cuando vayas a contratar un Seguro de Hogar debes saber que llevará aparejadas coberturas básicas y que podrás solicitar opcionales en función de tu tipo de vida, los terceros existentes que pudieses afectar en caso de incendio y los bienes contenidos en ella.
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